La Audiencia Provincial de Madrid ha acordado recientemente que la instrucción de un caso de presunto suicidio asistido a una enfermera terminal con esclerosis múltiple, en el que habría contado con la colaboración de su marido, continúe en el Juzgado de Violencia contra la Mujer.
La Sala motiva esta decisión al considerar que en la actual fase procesal no se dan las circunstancias para determinar de forma fehaciente si se trata o no de un acto de violencia sobre la mujer en el ámbito de la pareja, tal y como marca la Ley.
A pesar de que la magistrada del Juzgado de Violencia sobre la Mujer defendió la exclusión de esta causa de sus competencias, la Audiencia dictamina en su auto que en el actual momento procesal no concurren motivos para ello.
Los magistrados de la Audiencia Provincial de Madrid argumentan que aún faltan elementos probatorios que impiden eximir de sus competencias al juzgado encargado de instruir dicho procedimiento.